Ir paseando una tarde muy fría de otoño por esos parques de nuestra ciudad llenos de color, un color característico (amarillo mostaza) de las hojas otoñales, pisarlas y de repente cerrar los ojos y "evadirnos" (esa palabra que tan bien nos define), respirar hondo e imaginarnos que ese parque nos pertenece. (Sí, a veces somos un poco "Alicia" ;)
Y como ese parque es nuestro, hacemos y deshacemos en él lo que queremos, eso sí, enfundadas en nuestras bufandas y gorros de lana, "parece que nos hacen fuertes" jajaja...acordaos que nos hemos evadido y ahora tenemos el poder.
"Cruz y raya para toda la batalla"
Ava &Nora
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